"Roma locuta, causa finita"
Por Alberto Pinzón Sánchez
«Roma locuta, causa finita», decían los antiguos latinos de la Roma Imperial. Así, el sr embajador de USA en Bogotá William Brownfield, ahora investido con la potestad de virrey de Colombia, lo sentencia con los ojos guiñados y de manera inapelable desde todos los micrófonos del régimen: “La seguridad democrática no es perfecta, y se le deben hacer cambios para perfeccionarla” (28.11.09).
De inmediato una cascada de reacomodos se empieza a dar en el seno de la arrastrada oligarquía latifundista-financiera colombiana: Uribe Vélez desde una de las tantas bases militares (subterráneas) que tiene en Arauca anuncia (sin precisar) una nueva estrategia para derrotar la subversión.
El agnato (a=sin, gnatos= quijada) ministro de Defensa Silva amplía la versión de su jefe gremial, y dice que los problemas internacionales en los que los vendepatrias han metido deliberadamente, no sólo a su parásita clase social sino a todo el pueblo colombiano, no deben distraer la atención del Estado, pues el enemigo estratégico número uno sigue siendo la insurgencia.
Todos los precandidatos a las elecciones próximas (sin excepción) se declaran continuadores y “perfeccionadores” de las exitosas políticas de la «seguridad democrática» de Uribe Vélez. El ex presidente César (OEA) Gaviria renuncia de manera sorpresiva y extraña a su puesto de “macho alfa” (sus aduladores lo llaman el jefe natural del Partido Liberal), y en consecuencia Pardo Rueda se siente señalado o interpretado por las palabras guiñadas del virrey y anuncia desde ya lo que será la “perfección” de su mandato presidencial.
…Ha habido unos golpecitos militares en el sur del país pero sin la gran importancia que les asignan algunas ONG. Los paramilitares. Ah, los paramilitares de los que hablan ya no son los mismos. Ahora no son un peligro para el Estado; son unas bandas disminuidas de cerca de 2.800 narcotraficantes. Lo que necesitamos es tiempo para llevar a feliz término la «seguridad democrática»…Tampoco deseamos la guerra con ningún vecino pero si se da, la ganaremos…
Así repiten y vuelven a moler como en un carrusel monótono y enajenante todas las agencias del aparato nazi de propaganda del régimen fascista de Uribe Vélez, esta vez dirigidas y orquestadas desde la más grande embajada del mundo, con el fin de minimizar, ocultar, disminuir o adormecer la alarma internacional que ha causado el contrato de entrega y ocupación de Colombia por el USArmy.
Y mientras el conflicto colombiano sigue dando vueltas con el carrusel mediático,; la contradicción real entre lo interno y lo externo del mismo conflicto armado sigue su curso inexorable hacia su antagonismo definitivo, y lo militar se torna más político, mientras lo político se torna más militar.
No en vano el digno representante del gobierno bolivariano de Venezuela en las Naciones Unidas ha pedido oficialmente en su asamblea que la condición básica para la estabilidad de la llamada “región andina” es la solución internacional definitiva del conflicto interno colombiano, el que sin querer queriéndolo fue llevado a las fronteras que se violaron con bombardeos criminales (caso Ecuador) o infiltrándolas con paramilitares (caso Venezuela) hasta internacionalizarlo irremediablemente.
Los campesinos colombianos, más crudos en su hablar, dicen más o menos lo mismo que los antiguos romanos en romance vulgar así: “cuando el garañón rebuzna, todos los demás paran las orejas”.
Craso error: La frase «Roma locuta, causa finita» no es atribuible a un dicho de la época imperial romana, aunque se origina temporalmente en el siglo V; La frase la pronunció San Agustín en relación a la condena que el papa Inocencio I hizo del pelagianismo.