Varela y Martí

Texto: Héctor Quintero
Ilustración: Ángel Velazco

Aunque Félix Varela y José Martí no se conocieron, entre ambos existen muchos puntos en común. Martí nació unos días antes de que Varela falleciera en San Agustín, Florida.

Ser cubanos y patriotas fue lo distintivo de sus gloriosas vidas. Varela tuvo desde niño la vocación de ser sacerdote y servir a los demás. Martí se consagró a la libertad de la Patria “con todos y para el bien de todos”.

Ambos nacieron en La Habana Vieja, eran hijos de militares y fueron bautizados
en la iglesia del Santo Ángel, cercana al actual Museo de la Revolución.

La esclavitud para Varela era “el infierno en la tierra”, para Martí “la gran pena del mundo”. Ambos la repudiaron y escribieron contra tan inhumana explotación.

En marzo de 1821, Varela es electo diputado a las cortes españolas. Allí es nombrado en la Comisión de Instrucción Pública y en la Comisión para el estudio de los problemas de las provincias de ultramar.
Pero lo más destacado es su proyecto para la abolición de la esclavitud, que nunca se llegó a leer en las Cortes porque el rey las disolvió, y condenó a muerte a los diputados que se habían manifestado en su contra, Varela escapó a Nueva York (1823).

Los dos vivieron en Nueva York donde desarrollaron su magisterio y escribieron gran parte de sus respectivas obras. Varela creó y dirigió el periódico El Habanero, y Martí hizo lo mismo con Patria.

Estos dos cubanos también fueron maestros, Varela en el Seminario de San Carlos y San Ambrosio, de La Habana y Martí en Guatemala y en Estados Unidos.

Ambos fueron contrarios a la anexión de Cuba a los Estados Unidos, pues pensaban que eso sería siempre funesto para la nación cubana.

Varela escribió, entre otros textos: Lecciones de filosofía, Misceláneas filosóficas, Instrucciones filosóficas, Cartas a Elpidio… Por su parte, la obra de Martí es muy extensa y nos dejó un legado inmenso que, junto al de Varela, forma parte del rico patrimonio ideológico y espiritual de la Patria.

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