Presos irlandeses en lucha
Cambera Roja
Se entiende que los reclusos en las instalaciones de alta seguridad en las afueras de Lisburn han estado vertiendo excrementos al rellano del bloque de celdas en la protesta en curso, forzando al Servicio Penitenciario de Irlanda del Norte de dotar de ropa de protección para el personal.
Es parte de una larga disputa sobre las condiciones dentro de la cárcel – se ha afirmado que los presos están encerrados durante 23 horas al día y que están siendo privados de alimentos y de los derechos de visita.
El presidente del Sinn Féin, Gerry Adams, dijo a UTV que miembros del partido han visitado la prisión “para explorar las condiciones y reunirse con los prisioneros”. Y añadió: “Hemos hecho gestiones ante el ministro de Justicia y los funcionarios competentes encargados de la prisión. Yo apoyo a las familias de los presos y apoyamos el derecho de los presos a recibir el tratamiento adecuado y yo creo que tengan motivos de queja que necesitan ser tratados”.
Un portavoz de las familias de los prisioneros, Gerry Hodgins, dijo que los manifestantes están exigiendo la condición política y el acceso a representación legal.
“Una prisión sólo funcionara cuando haya cooperación entre los presos y el personal de la prisión”, dijo.
“No hay cooperación en esa prisión en este momento – se gobierna de una manera muy vengativa y punitiva”.
Pero Finlay Spratt de la Asociación de Funcionarios de Prisiones dijo que los reclusos sólo quieren el control de la cárcel.
“Es esa vieja discusión acerca de quién controla las prisiones – ¿son los prisioneros o son las autoridades?” dijo.
”Los prisioneros desean gobernar la prisión. Bueno, eso no es para lo que está la cárcel”.
Protestas Sucias se escenificaron previamente durante el conflicto (de los años 70, 80 y 90), cuando los prisioneros republicanos tomaron la iniciativa, antes de las huelgas de hambre en 1981.
© UTV News
(extraído de medios británicos y traducido al castellano para Cambera Roja)
Opinión sobre la situación actual en Irlanda, el Norte:
Debemos tener en cuenta que esta noticia es de los medios al servicio de los intereses británicos en Irlanda. Por tanto nunca podrán tener esa supuesta “objetividad” e “imparcialidad” de la que los medios capitalistas e imperialistas (como el caso de los españoles) presumen atrevidamente hasta la saciedad. Pero de sus noticias, manipulación y juegos de palabras incluidos, las más de las veces se puede extraer información real.
De esta se puede entender lo siguiente para empezar:
– Los presos republicanos siguen la lucha iniciada varias semanas atrás, que continúa a su vez otras anteriores. Silenciada completamente, la represión se ha cebado en los prisioneros republicanos. Estos han continuado sin cesar su lucha por el estatus político y el acceso a representación legal.
– Las movilizaciones republicanas en las calles de los seis condados directamente ocupados por la Corona Británica en solidaridad con los POW´s Republicanos están teniendo sus frutos. Esta situación, que llevaba meses y meses siendo sufrida por los POW´s irlandeses en medio de la marginación y el silencio impuesto, está ahora llegando a la sociedad irlandesa.
Por todo esto los medios deben recoger esta noticia, por supuesto de forma escueta e irrelevante. Esto supone un reconocimiento explicito del conflicto existente en la prisión británica, lo cual había sido negado por activa y pasiva, incluidos muchos periodistas y políticos nacionalistas. Pero ya han tenido que recoger en los medios masivos las denuncias (aunque no informen directamente de ellas) sobre las condiciones que sufren los POW´s y la existencia de resistencia por parte de los prisioneros republicanos irlandeses a las mismas.
No se le debe olvidar a nadie que realmente no nombran las principales exigencias de los presos; en ningún momento informan objetiva y completamente, ni dan voz a los presos. Todo ello normal. Su función es precisamente la contraria.
Lo más importante políticamente es la posición del Sinn Féin y su situación a raíz de este nuevo conflicto de los POW´s irlandeses en las cárceles británicas. No se le debe olvidar a nadie que los del SF tampoco son “unos que pasaban por ahí” precisamente, sin responsabilidad. El SF es miembro del gobierno del Norte de Irlanda y parte de sus “instituciones”, Policía y cárceles incluidas. Esa Policía de ocupación que es rechazada en los barrios obreros nacionalistas y republicanos; esas cárceles donde los prisioneros republicanos sufren unas condiciones intolerables y negación de sus derechos.
Así Gerry Adams ni se inmuta intentando hacerse pasar por un simpatizante de los presos republicanos y sus familias. Claro que niega y oculta la raíz del conflicto: la ocupación británica que hace que el republicanismo irlandés, hoy como ayer, tenga motivos para luchar, y cientos de irlandeses cumplan con los deberes hacia su nación y su Pueblo. Política, social y militarmente. Pero los británicos no diferencian. El problema es ser un rebelde, un republicano irlandés. Así, muchos republicanos están presos, sin importar lo que han hecho o no. Como le paso recientemente al portavoz del 32 CSM en Derry, o algún miembro del RSF, entre otros ejemplos.
Pero este ejercicio de hipocresía de Gerry Adams es también un reconocimiento implícito del avance de la lucha solidaria con los POW´s en Irlanda. Que su partido y especialmente él (junto a Martin McGuiness) sean culpables, entre otras cosas, de haber acabado precisamente con el estatus político para los prisioneros republicanos (en una abierta traición a la lucha de los diez mártires del 81 por ese preciso estatus), debería dejar a las claras de que lado están… o al menos, del lado que no están: el de los POW´s y la causa republicana.
Hoy, como en esos días de hace 10-11 años cuando terminaron de llevar a cabo una de las peores y mayores maniobras contra la causa republicana irlandesa, siguen manteniendo que “el conflicto se ha superado” y que “la normalidad se ha hecho hueco y es una realidad en el Norte de Irlanda”. Vamos, aquí paz y después gloria, entre los jaleos de la Corona británica.
Eso sí, mucho pacto y negociación pero ningún de los objetivos estratégicos de la histórica causa y lucha republicana fueron conquistados; eso sí, en parte se rompió con la historia de lucha y, de hecho, la ansiada reunificación de la nación irlandesa (Sur y Norte) se volvió a alejar ostensiblemente del horizonte.
La negación del trauma causado y la enorme oposición dentro de la comunidad y organizaciones republicanas fue, y es, ley. De la noche a la mañana el conflicto irlandés ya no existía, y todo el movimiento republicano seguía y aceptaba el nuevo rumbo marcado por un liderazgo. Hoy, como ayer, eso es falso.
Hoy ya existen nuevas organizaciones republicanas asentadas y respetadas por la comunidad (32 County Sovereignty Movement, Republican Network for Unity en el lado político –Ejército Republicano Irlandés de la Continuidad y Ejército Republicano Irlandés Auténtico en el plano militar) y se mantienen las que cuando el Acuerdo del Viernes Santo se opusieron a él, destacando al Sinn Féin Republicano, y también el Partido Republicano Socialista Irlandés que tampoco aceptó el Acuerdo. Por su lado el Provisional IRA sufrió abandono masivo de activistas y militantes asqueados, en dos oleadas por así decirlo: primero con los que se opusieron al Acuerdo en sí; después los que, habiendo creído honestamente en la bondad del proceso, al ver la dirección que se tomaba se fueron. El Sinn Féin sufrió a su vez muchos abandonos, sobre todo de militantes históricos. A día de hoy los abandonos en el Sinn Féin son un goteo constante debido a su líneas política y de actuación, muy lejos de sus antiguas bases y más lejos aún de pretender ya ser un partido republicano irlandés… más que por el nombre.
De hecho, como las pruebas demuestran, parece que el republicanismo irlandés se está acabando de recuperar (no quiere decir que se haya llegado al nivel de fuerza de los 80, nadie está comparando ni debe comparar; lo importante hoy como ayer es seguir la lucha por libertad y no traicionar los principios republicanos y la memoria de los luchadores). Parece evidente que ha superado, a costa de grandes sufrimientos y esfuerzos (individuales y colectivos) la traición de los Adams y McGuiness y del actual (su) Sinn Féin.
Todo esto significaría haber derrotado una peligrosa y gravísima maniobra del Imperio Británico. La nación irlandesa, una vez más, vuelve a demostrar firmeza en sus derechos y decisión en la lucha, más voluntad de libertad. Con ello vuelve a ser, lo que nunca dejo de ser: un faro para los pueblos en lucha por sus derechos y libertad que, como el cántabro, corren el riesgo de sucumbir a la oscuridad imperialista.
Como se desarrolle en el futuro la lucha en torno a la causa republicana irlandesa, está por ver y es lo menos importante. Han vuelto a resurgir (volviendo al camino alejándose de la traición histórica que otros perpetraron en su nombre -eso de lo que el Movimiento Comunista Internacional también sabe) con dignidad.
Aquí y ahora: están vivos, caminando y peleando… ¡casi nada!
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