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Cheb Balowski:
"Somos positivos y buscamos lo bueno de la gente"

GASTEIZ- Cheb Balowski dio sus primeros pasos, tanto por Euskal Herria, como por el mundillo discográfico, de la mano de Iñigo Muguruza: los de Barcelona fueron los teloneros de la gira de despedida de Joxe Ripiau en Euskal Herria y Muguruza fue el productor artístico de su primer trabajo discográfico titulado Bartzeloona.

Recientemente han publicado su nuevo disco, Potiner, "es catalán, quiere decir chapucero, inquieto, como los niños que lo tocan todo, que empiezan a descubrir las cosas y a disfrutar de ellas", explica Yacine, joven argelino afincado en Barcelona y cantante de la banda.

"Cheb es lo que se les pone delante a los jóvenes cantantes de raí de Argelia y Balowski era el personaje de la serie cómica inglesa 'The Young Ones' que presentaba los conciertos", explican. Para este disco el grupo Cheb Balowski ha contado con la colaboración de Iñigo Muguruza que canta en la canción Cuentos de barras: "Le invitamos a Barcelona y al final no pudo venir pero le mandamos una cinta y lo hizo en su casa, fue todo muy curioso", puntualiza Yacine.

Potiner es un disco mucho más definido en cuanto a sonido y canciones si lo comparamos a Bartzeloona, que fue un disco mucho más difuso y atípico: "Para 'Potiner' hemos empezado a trabajar desde cero y con mucho más tiempo. El primer disco lo formamos con temas que llevábamos tocando desde hacía mucho tiempo. Sin embargo, ahora hemos tratado de construir un disco en general y concebirlo más en ese sentido".

Cheb Balowski es una batidora de influencias: "Somos como una esponja. Desde siempre venimos escuchando mucha música, ya que Barcelona es una ciudad que ayuda mucho en ese sentido porque hay muchas tiendas de discos y muchas influencias culturales por todos los lados. Nos cambiamos mucha música en el local de ensayo y de esa manera hemos conocido grupos como Zebda, Mano Negra, Fabulosos Cadillacs o la Orquesta de Kusturika", apunta Arnau, el multipercusionista de la numerosa formación catalana.

El sonido y la filosofía de la banda son una encrucijada de culturas mediante la cual intentan que la gente se libere de sus prejuicios y de sus miedos hacia la gente diferente. "Nos preocupa mucho el tema de la inmigración y todos los problemas que derivan de ella. Sacar fuera los miedos que existen en torno a las diferencias. Invitamos a la gente a que no se quede sólo con esos miedos. Siempre somos positivos y buscamos lo bueno de la gente que nos rodea", explica Yazine.

Para ello la banda funde en sus temas influencias de la música raí, la música balcánica, la música tradicional de Catalunya, el flamenco, la salsa, el reggae o el ska. El directo es el punto fuerte de una banda que desde el escenario intenta que "el mundo baile libre, sin miedos y sin perjuicios de ningún tipo y mezclando culturas".