El trovador cubano Vicente Feliú deleitó el pasado sábado 7 de junio a los espectadores que llenaron el Kafe Antzokia de Bilbao (una de las mejores salas de conciertos del País Vasco), en un concierto de solidaridad y reafirmación con la Revolución socialista cubana organizada por Resumen Latinoamericano. También adhirieron al evento las organizaciones internacionalistas vascas Euskadi-Cuba, Askapena y Comités Internacionalistas.

Al comienzo del encuentro musical, el responsable de la edición europea del periódico Resumen Latinoamericano, Willy Nocetti leyó un manifiesto titulado Ayer, hoy y siempre con Cuba socialista. El texto señala: "Hace 44 años que la dignidad de los pueblos del Tercer Mundo tiene un claro referente. Se llama Cuba y su vitalidad revolucionaria inunda de ganas y coraje a todas y todos los que a duras y maduras seguimos peleando por la Revolución y el Socialismo.

Hoy más que nunca, la criminalidad del imperialismo yanqui y sus aliados europeos se vuelven a cebar con la Isla, precisamente por todo lo que ella significa de desafío a sus pretensiones de dominación y conquista. Y nuevamente es el heroico y conscientizado pueblo cubano el que les planta cara, denunciando así su idea de expandir el fascismo que hoy gobierna en Washington por todo el mundo.

Los pueblos que luchan por su liberación nacional y social saben muy bien lo que significa rebelarse contra el discurso único, la prepotencia imperial y la colonización cultural. La misma receta que yanquis e ingleses aplican en Iraq, tiene su correlato en esta rebelde tierra de Euskal Herria que resiste una y otra vez la prepotencia colonial con que los guerreristas del gobierno de Madrid intentan imponer su medicina correctiva.

En nombre de todas y todos los que no se rinden ni reniegan de sus principios convocamos otra vez a solidarizarnos con Cuba, porque su lucha es la nuestra, su ejemplo es el que nos da coraje, y su decisión de no doblegarse servirá para abonar el terreno en el que tarde o temprano crecerá la unidad indisoluble de los pueblos que creen en la autodeterminación.

No importa que una prolija corte de intelectuales hayan decidido bajarse de su adhesión a la Revolución cubana, no importan tampoco los devaneos facilistas de quienes en nombre de una falsa izquierda se suman al coro de condenadores auspiciado por los Estados Unidos. Ellos se pierden la posibilidad de disfrutar las enseñanzas emanadas de un proceso revolucionario de características originales, que liderado por Fidel, ha convertido en realidad ese otro mundo posible por el que el resto del planeta sigue luchando.

Por eso decimos bien fuerte. Con Cuba y el socialismo. Con su pueblo invencible que genera hombres como los cinco héroes prisioneros en las cárceles yanquis. Contra la agresión imperialista. Contra la complicidad de sus lacayos.

Gora Kuba Askatuta (Viva Cuba Libre)
Gora Euskal Herria Askatuta (Viva Euskal Herria libre)"

En la primera parte del encuentro, la bertsolari (canto "a capella" de improvisación muy similar a los payadores rioplatenses o a los repentistas cubanos) Maialen Lujanbio, entonó versos de solidaridad con Cuba y referidos a la presencia del trovador cubano Feliú. Luego subió el cantante al escenario y en pocos minutos metió al público -entregado- en un clima de maravillosas y sentidas canciones de su amplio bagaje artístico.

El autor de Guevarianas impuso su profesionalidad y entrega, pero también su compromiso inalienable con una isla que sigue peleando contra los enemigos de siempre.

El resultado final: un excelente concierto y un canto a la unidad y lucha de los pueblos.

Vicente Feliú. Cantautor y cofundador de la Nueva Trova Cubana
"Pese a todos los capitalistas que quieren que nos vayamos al carajo, allí estamos, firmes"

Gara

Vicente Feliú vuelve a Euskal Herria por cuarta vez, la tercera para actuar. Este cofundador de uno de los movimientos culturales de la música popular más importantes del siglo XX, la Nueva Trova Cubana, continúa pensando en voz alta, acompañado de su guitarra. Pensamientos que hablan de gente corriente que quiere vivir en libertad y que inevitablemente hacen referencia a su país, Cuba.

-¿Cuándo empezó usted a tocar y a componer canciones?
- Comencé simultáneamente a componer y a tocar la guitarra cuando tenía 16 años gracias a la guitarra de mi padre, quien también hacía canciones. A partir de ahí empecé a cantarlas en mi entorno, en el instituto de segundo de enseñanza. Coincidí con otros jóvenes adolescentes como yo, que estaban haciendo sus canciones basadas en su historia y en sus vivencias. Después, con el tiempo, resulta que algunos acabamos siendo los fundadores del movimiento conocido como la Nueva Trova Cubana.

-¿Cómo era La Habana por aquel entonces?
- La Habana en 1964 no era tan bonita como la de 1958, ni como la de ahora. Era una Habana intermedia entre la salida de un sistema capitalista, consumista y mafioso, y la entrada en un sistema socialista que comenzaba a funcionar. Era una ciudad que bullía creativamente y que trabajaba muy duro.

-¿Qué objetivos tenían Silvio Rodríguez, Pablo Milanés, Noel Nicola y usted cuando comenzaron aquel movimiento?
En realidad teníamos un objetivo, desaparecer. Hay que tener en cuenta que el fenómeno de la canción trovadoresca es probablemente el elemento cultural más importante de la nación cubana. No pretendíamos perpetuar la Trova. Era un movimiento necesario en aquel momento de los años 60 para reafirmar una vez más el hecho de la significación cultural que tenía la trova en la cultura cubana y en la música cubana.

-Ustedes desaparecieron como organización, pero la historia quedó ahí para las siguientes generaciones.
Claro, una vez que la Trova fue asimilada por todo el mundo, incluso por los burócratas, ya entonces podíamos perfectamente desaparecer. Pero claro, como organización, como historia no, el que hace la historia la hace. Y sí, felizmente después de nosotros vinieron, por lo menos, dos generaciones de trovadores que continuaron con el espíritu de la primera Trova.

-¿Y en la actualidad, existe algún movimiento similar?
Creo que ahora está surgiendo una tercera, con sus propias características, con su lenguaje y claro, con las raíces del pasado.

-¿Cómo ve la ciudad de La Habana en la actualidad?
La disfruto mucho porque es una Habana que está emergiendo de nuevo, en medio de un socialismo que no cae, que no pueden tumbar, -no es fácil tumbarlo- y que pese a todos los intereses norteamericanos, capitalistas y neoliberales que pretenden que nos vayamos al carajo, ahí estamos. Es una ciudad bien hermosa.

-En un momento en el que el mundo está en retroceso, Cuba parece una isla en todos los sentidos.
Sí, el mundo está en retroceso y cada vez es más oscuro y más peligroso. Hay una evidencia de que EEUU intenta imponerle al mundo un sistema fascista y feroz. Para ello cuentan con algunos colaboradores, gente que quiere que así sea. Que ellos puedan intervenir en cualquier oscuro rincón del mundo porque les parezca, porque en realidad las justificaciones son más estúpidas, más absurdas y más falsas. Eso nosotros lo sabemos porque llevamos luchando contra ello desde el siglo XIX. Pero es muy desagradable para todo el mundo.

-¿Qué recuerda de sus visitas a Euskal Herria?
- Recuerdo un público muy activo. Una vez estuve tocando en solitario en Bilbao y la otra acompañando a Silvio Rodríguez en San Sebastián en su gira del 95. Vine en otra ocasión pero fue simplemente para promover un disco.

-En el concierto de esta noche le acompañará la bertsolari Maialen Lujanbio.
Así es, me encanta compartir el escenario con otra gente y con otros músicos. A mí no me gusta estar solo en los conciertos. Me alegro de que Maialen esté conmigo esta noche.

-¿Le acompaña alguien más?
Sí, conmigo viene Aurora de los Andes Feliú, que es mi hija y que canta conmigo desde que era niña. También Carel García, un trovador cubano que vive en Barcelona. Así que no estará solo el viejo fundador de la Nueva Trova Cubana.